Te explicamos como hacer  croquetas de jamón para que estén exquisitas.

A todo el mundo le gustan las croquetas de jamón ¿verdad? incluso las que no están muy buenas. A mi no me hace falta probarlas para saber si están a mi gusto, basta con partirlas  y ver si están cremosas o si es un engrudo. Por supuesto cada uno las hace a su gusto, como todo en la cocina, pero si quieres que te queden cremosas y exquisitas hay que respetar las proporciones de harina, mantequilla y leche.

Ingredientes:

• 100 g de mantequilla
• 100 g de harina
• 1 litro de leche
• Jamón
• Sal, pimienta y nuez moscada
• Harina para rebozar
• 2 huevos
• Pan rallado
• Abundante aceite para freír.

En una olla de fondo grueso ponemos la mantequilla a fuego bajo para que no se queme. Cuando se haya derretido añadimos la harina, removemos durante un par de minutos.

Vamos añadiendo la leche muy caliente a la vez que removemos sin parar para que no se formen grumos.

Sazonamos (cuidado con la sal porque el jamón es salado) y cocemos durante 20 minutos removiendo para que no se pegue.

Cuando faltan 2 minutos incorporamos el jamón muy picadito, si es ibérico mucho mejor.

Mezclamos y comprobamos la sazón.

Lo vertemos en mangas pasteleras.

Las cerramos y dejamos enfriar completamente, mejor de un día para otro.

Cortamos la punta de la manga pastelera y hacemos rulos sobre una bandeja con harina.

Los rebozamos bien girandolos sobre la harina y los cortamos. Enharinamos también los extremos, sacudimos el exceso y pasamos por huevo batido.

Rebozamos en pan rallado.

Y ya estarían listas para freír, pero a mi me gusta congelarlas primero, así se evita que se abran al freírlas y no solo se quedan vacías, sino que se mancha el aceite.

Se colocan en una bandeja, separadas unas de otras para que no se queden pegadas. Se congelan y cuando están duras se meten en una bolsa y se van sacando las que se vayan a freír.

Si se van a freír muchas, lo mejor es hacerlo en una freidora. Se introducen en el aceite muy caliente en tandas de 10 aproximadamente para que el aceite no se enfríe demasiado. Cuando estén doraditas se sacan y se colocan sobre papel de cocina para quitar el exceso de grasa. A continuación se meten en el horno  unos minutos para que se calienten por dentro. También se pueden meter en el microondas, en ese caso hay que estar muy atentos porque si nos pasamos de tiempo se rompen.

Variantes:

• Cambia el jamón por chorizo asturiano o similar muy picadito, el resultado te sorprenderá.
• Con queso azul también están buenísimas.
• Con huevo duro.
• Cuando hay problemas con el colesterol, se puede cambiar la mantequilla por aceite de oliva virgen extra. Por supuesto el sabor es diferente pero no menos exquisito.